El cine alemán que vaticinó el ascenso de Hitler (parte 1)

Introducción

El cine es el mejor medio artístico para acercarse a la mentalidad de una nación ya que las películas nunca son el resultado de una obra individual. Como dice Pudovkin, en esta expresión artística destaca el carácter colectivo de la obra cinematográfica. Además, se dirigen y se interesan por un público multitudinario y anónimo.

Los creadores de las películas dependen de las cualidades inherentes a su material. Incluso las películas nazis oficiales de la guerra reflejaron ciertos aspectos y características nacionales que no podían ser inventados. De este modo, las películas más que credos explícitos reflejan las tendencias psicológicas, los estratos profundos de la mentalidad colectiva que corren por debajo de las dimensiones conscientes. Al registrar el mundo visible, al tratar de la realidad cotidiana o de los universos imaginados, las películas proporcionan las claves de los procesos mentales ocultos.

Esto nos lleva a hablar sobre un tema muy interesante: las claves de la psicología de la sociedad alemana del periodo de entre-guerras a través del cine y concretamente del Expresionismo alemán.

Contexto político de la Alemania prenazi

En la Alemana prenazi, la clase media penetró en todos los estratos, compitiendo con las aspiraciones políticas de la izquierda y cubriendo al mismo tiempo los vacíos de la mentalidad de la clase superior. Este hecho explica el apego nacional del cine alemán, ya que se trataba de un cine fuertemente arraigado en la mentalidad de la clase media.

La Revolución alemana de 1918 no consiguió las consecuencias deseadas al continuar en el poder las fuerzas tradicionales durante el periodo conocido como la República de Weimar (1919-1933). Esta república fue presionada por las consecuencias políticas de las derrotas y las estratagemas de los principales poderes financieros e industriales alemanes, quienes apoyaron incondicionalmente la inflación y empobrecieron a la vieja clase media.

Puerta de Brandeburgo durante la Revolución alemana de 1918.

No obstante, estos factores económicos, políticos y sociales no son suficientes para explicar el impacto del hitlerismo. Erich Fromm considera que las tendencias psicológicas de los obreros alemanes neutralizaron sus principios políticos, precipitando el colapso de los partidos socialistas y de los sindicatos. La conducta de amplios estratos de la clase media parecía estar determinada por las abrumadoras compulsiones que sufrieron durante estos años. La consecuencia directa fue el desamparo mental, persistiendo un tipo de vacío que se sumó a su obstinación psicológica.

El sometimiento a los nazis estaba basado en las fijaciones emocionales. Así podemos ver que detrás de la historia evidente, se esconde una historia que abarca las tendencias íntimas del pueblo alemán. Demostrar estas tendencias por medio del cine alemán nos ayuda a comprender el poderío y el ascenso al poder de Hitler.

Inicios del cine alemán (1895-1918)

Teóricamente el cine alemán comienza en 1895, dos meses antes de la primera proyección pública realizada por los hermanos Lumière, con los hermanos Skladanovski que dieron a conocer el Bioscop en el Wintergarten de Berlín. Sin embargo, este hecho apenas tuvo consecuencias provocando que Alemania careciera de una industria cinematográfica propia hasta 1910.

Hermanos Skladanovski con el Bioscop.

Durante unos años se consideró que la sala de cine era un lugar de mala muerte al que acudían obreros, jóvenes, vagos y gente rara. Sin embargo, esta negativa imagen del cine cambio después de 1910, cuando se produce la liberación del cine de las ataduras culturales y de los prejuicios intelectuales. Este paso hizo que directores, actores y otros miembros del teatro se interesaran por este nuevo arte.

Por estos motivos, podemos considerar que antes de la I Guerra Mundial (1914-1918), el cine alemán se encontraba en un periodo arcaico, pero no por ello menos importante. A lo largo de este tiempo, especialmente, durante el conflicto bélico, se concretaron ciertas condiciones que dieron la fuerza y el poderío que tendría el cine de este país tras la guerra.

Comenzada la I Guerra Mundial, el clan reformador del cine germano se unió a la creencia de los jóvenes de que la guerra daría un sentido nuevo a sus vidas. La época de paz supuso la crisis de la industria cinematográfica alemana. Esta situación se invirtió con la guerra, liberando al cine de la competencia extranjera al cerrar las fronteras. De este modo, la producción alemana era la única que se podía ver durante este periodo.

Por tanto, podemos considerar que la I Guerra Mundial fue el detonante para que naciera el cine alemán como tal. La contribución de la guerra y de la posguerra supusieron la preparación de una nueva generación de actores, directores, operadores y técnicos de cine.

El nacimiento de la UFA y el sentimiento de Aufbruch

El cine de la posguerra chocó con un rígido bloqueo internacional que duraría varios años. Para superar esta situación, la UFA (Universum Film AG.) se aseguró salas cinematográficas en Suiza, Holanda, España y en otros países neutrales. Cuando las autoridades alemanas crearon la UFA, se apropiaron de actividades que en las democracias son fruto de la presión pública. Debido a las necesidades de la guerra, las películas estaban exclusivamente basadas en argumentos hechos por expertos, ya que las autoridades alemanas creían que tenían el derecho de manipular la opinión pública conforme a sus deseos.

Escenarios de las instalaciones de la UFA en el distrito de Tempelhof en Berlín en 1920.

El nacimiento del cine alemán no sólo obedece a la creación de la UFA, sino, también, en la exaltación intelectual de la Alemania de la posguerra. La situación en la que se encontraban los alemanes puede ser definida mediante la palabra Aufbruch que viene a significar el abandono del mundo derruido del ayer hacia un mañana edificado sobre el terreno de concepciones revolucionarias.

Este hecho explica, al igual que ocurrió en Rusia, por qué el arte expresionista se hizo tan popular en este periodo. En el despertar de ese Aufbruch desaparecieron los últimos prejuicios contra el cine, atrayendo las fuerzas que necesitaban para expresar las nuevas esperanzas y temores que se sentían con este cambio de era. Los alemanes consideraron que el cine era el único medio para difundir mensajes a las masas.

Las tres principales películas del periodo arcaico del cine alemán

De este periodo arcaico destacan tres películas por anticipar importantes temas que aparecieron en la posguerra.

Der Student von Prag (El estudiante de Praga, 1913) de Wegner, introdujo un tema muy recurrente en la cinematografía alemana de la posguerra en adelante: una preocupación temerosa y profunda por el trasfondo del “yo”.

Tráiler de Der Student von Prag (El estudiante de Praga, 1913).

Dos años después Wegner produjo su segunda película, Der Golem (El Golem) en la que predijo el ascenso de Hitler. Esta película gira en torno a Homunculus, una persona a la que asesinan a su perro. Su odio hacia el mundo le convierte en el dictador de un gran país y se disfraza de obrero para llevar a las masas a la huelga y aplastarlos sin piedad. Finalmente, Homunculus, precipita una guerra mundial. Los alemanes se parecían a Homunculus ya que tenían complejo de inferioridad a causa de la evolución histórica de su país que fue en detrimento de la autoconfianza de la clase media. Es sorprendente como una película vaticinó lo que acabaría ocurriendo dos décadas después.

Fragmento de la película perdida de Der Golem (El Golem, 1915).

La tercera película de este periodo arcaico es Der Andere (El otro, 1913). Esta obra se distancia de las de corte fantástico que reflejaban ciertos síntomas de intranquilidad colectiva por tratar los mismos temas pero dede un punto de vista trivial y optimista.

Póster de Der Andere (El otro, 1913).

Y hasta aquí la primera parte de este artículo sobre cine alemán y el ascenso de Hitler. Espero que os haya gustado.

En la siguiente parte hablaré sobre cine expresionista alemán como tal y de obras tan importantes como El gabinete del doctor Caligari.

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